María Fernanda Campos Castro
Psicoterapeuta Infantil
04/08/2014
04/08/2014
En definitiva, la elección de una
escuela para tu hijo o hija es crucial para cualquier persona adulta
responsable e interesada en los estudios de una persona menor de edad ya que es
ahí donde pasaran largo tiempo (desde 4, 5 o incluso 8 horas del día y varios
años de formación) en manos de personas que tendrán la responsabilidad de
guiarlos en el desarrollo académico y personal. Por lo que la confianza en la
institución es una de las sensaciones que deberá de acompañarte en la toma de
esta decisión como de la formación de tu hijo o hija.
Si tú eres un papá o una mamá con este
interés, aquí te comparto algunas consideraciones significativas que deberás
tener presente para este nuevo ciclo escolar al momento de inscribir a tu hijo o
hija.
1. Una
escuela abierta al dialogo. Observa cómo te reciben
y cómo reciben a tu hijo o hija, la amabilidad con que responden a tus
preguntas, dudas e inquietudes, las actitudes de las personas responsables de
la institución, de quienes forman al cuerpo docente y del resto de las personas
que ahí laboran.
Recuerda
que centrar tu atención en estos detalles te permitirá elaborar ciertas
conjeturas respecto del sistema de valores y creencias que ahí privilegian,
como dirían “el verlos actuar habla más que mil palabras”.
Esto
te ayudará a conocer la disposición que tienen para trabajar junto contigo en
la formación académica de tu hijo o hija. Ten presente que es un trabajo en
equipo entre tú y la escuela, por lo que también deberás estar con la
disposición para colaborar con ella.
2. Una
escuela que maneje un sistema de valores similar al que manejas en casa. Los valores que son
importantes para tu familia deben concordar con los valores que aprueba la
escuela, por ejemplo, si te gusta que tu hijo sienta calidez y respeto, una
escuela militarizada no será tu mejor opción.
Para
poder definir este punto, te invito a que primero reflexiones e identifiques el
sistema de valores que manejas con tu familia, y segundo, ampliar el punto
anterior preguntando por el programa de valores, la misión y la visión que la
escuela tiene.
3. La
reputación de la escuela. Cada escuela forma una reputación
que la distingue. Siempre procura preguntar a las personas conocidas sobre lo
que saben de esa institución, y si eres nuevo en el lugar, acércate a los
padres y las madres de familia que veas salir de ella.
Considerar
opiniones de otras personas puede darte un panorama importante de cómo se vive
dentro de la institución más allá de los informes que brinda la escuela (y que
suelen ser siempre favorecedores). Si escuchas una opinión negativa, explora
esa información y concéntrate en el cómo la escuela apoyó para resolver la
situación.
4. La
capacidad de la escuela para la resolución de conflictos. Es
muy importante estar conscientes de que no existe escuela libre de conflicto.
Por eso deberás de identificar si ahí cuentan con algunas estrategias,
programas y/o profesionistas que se dediquen a la resolución de conflictos,
tales como el bullying.
Hoy
en día existen programas que brindan
soporte sobre estos temas de violencia, fracaso escolar, orientación educativa,
etc.
5. Programas y niveles académicos. Seguramente,
tú como papá o mamá, guardas cierta preocupación y ocupación por hacer de tu
hijo o hija las mejores personas y es por eso que buscas lo mejor en una
escuela, por ejemplo, la enseñanza de diferentes idiomas y actividades
académicas y deportivas extraescolares. Sin embargo, el mejor programa y nivel
académico estará en función de las capacidades de tu hijo o hija, el apoyo que puedas
brindarles y el tipo de acompañamiento que la institución les brinde.
6. El estrés. Las
relaciones interpersonales se ven afectadas por el estrés. Si dedicas gran
parte del día a tu trabajo, la escuela de tu hijo o hija debe ser aquella que quede
cerca de casa o camino al trabajo, así, llevarlos y recogerlos, no será una
dificultad y causa de mal humor.
Si
lo requieres, considerá escuelas que tengan programas de apoyo para los
alimentos y las tareas.
Pon en una
balanza lo que te brinda la escuela y si eso es lo que necesitan para que su
relación de padre, madre e hijo, hija sea lo más saludablemente posible y con
tiempos de calidad.
María Fernanda Campos Castro
Psicoterapeuta Infantil
www.centroliber.com
gracias! creo que no lo he hecho tan mal!
ResponderBorrarNos da gusto leerte con esa convicción. Esperamos que así siga siendo en cada paso formativo por el que caminan de forma conjunta.
BorrarGracias por leernos y compartirnos algo de tu experiencia.